Nuevo personaje en la historia tipográfica porteña
En su proyecto Identificación de las letrerías de la Buenos Aires colonial (1780-1810), el prof. Fabio Ares investiga el repertorio tipográfico de la primera imprenta de la ciudad de Buenos Aires: la Real Imprenta de Niños Expósitos.
El análisis e identificación de las letrerías se constituye en un trabajo original que brinda nuevos datos sobre la tipografía porteña. Su completamiento permitirá determinar, entre otros aspectos, el origen de los tipos y la fundidora y el punzonista que grabó las matrices para su fundición. La investigación contempla el análisis comparativo entre inventarios, impresos y muestrarios de origen europeo. Se consultan fuentes diversas, entre las que se destacan las primarias como impresos y especímenes, y se estudia el contexto de aprovisionamiento, producción y comercialización de tipos móviles.
Encabezado del Telegrafo Mercantil.., con letra y ornamentos de 1790. |
En este marco, y concentrados en las letrerías llegadas desde España en 1790, aparecen los cortes de Antonio Espinosa de los Monteros, uno de los principales punzonistas de la tipografía española. En impresos porteños posteriores a 1890, y muy especialmente en la composición del primer periódico porteño: el Telégrafo Mercantil, Rural, Político, Económico e Historiógrafo –un verdadero paradigma del periodismo y las artes gráficas argentinas–, aparecen dos letras de Espinosa, más precisamente la "letura chica" y "letura gorda" redonda y cursiva, y varios diseños de ornamentos, tal como lo había sospechado la investigadora Marina Garone Gravier, en un trabajo anterior.
Letura gorda y chica en un muestrario de Espinosa. |
La llegada de estos nuevos materiales, especialmente la de los ornamentos, modificó la fisonomía de las portadas de las obras e impresos de Expósitos, marcó un verdadero cambio en el modo de componer y otorgó a estas piezas un aspecto netamente barroco, al incorporar pesados recuadros o cenefas. Esta tendencia comenzó a revertirse hasta volcarse definitivamente al estilo neoclásico en la segunda década del siglo xix, donde los ornamentos se reemplazaron por filetes y bigotes.
Los resultados de este primer hallazgo fueron publicados por la Universidad de Oviedo, en el trabajo "Las letrerías de Antonio Espinosa en la Real Imprenta de Niños Expósitos (1790-1802). El caso del Telégrafo Mercantil, primer periódico de Buenos Aires".
Próximamente, se publicarán sendos artículos sobre los avances de la investigación respecto de las llegadas de caracteres tipográficos a Buenos Aires, de 1807 y 1809, y en los que aparecen más personajes ingleses y españoles...
La letra, ahora, comienza a tener nombre y apellido.