La "Imprenta de la Patria” en la Feria del Libro
La primera imprenta del país se expone en la 36° edición de la Feria del Libro que se realiza del 22 de abril al 10 de Mayo.
Fue llevada a Córdoba por los jesuitas, en 1764, y luego transportada a Buenos Aires por el Virrey Vértiz; allí se convirtió en la Imprenta de Niños Expósitos.
En 1824 fue llevada a Salta y funcionó como Imprenta de la Patria en esa capital hasta 1867, cuando el caudillo Felipe Varela invadió la ciudad. Durante ese tiempo salió publicado el primer periódico salteño “La Revista Mensual”
En ese momento, algunos tipos de plomo de la imprenta fueron utilizados como metralla, y para fabricar balas para la defensa de la ciudad.
Según la creencia popular, allí habría terminado la historia de la añeja máquina, pero un trabajo del profesor Nestor Quintana se encargó de demostrar, que en realidad fue llevada a Cafayate, en donde funcionó hasta 1920. Quintana señaló, que lo último que se imprimió en esa máquina fue el diario cafayateño “La Verdad”, en la década de 1920.
Después ya no se la volvió a usar, y fue pasando de manos hasta que la recuperó Florentino Tilca, quien la cedió a la Municipalidad de Cafayate en 1979.
La prensa forma parte de la colección del Museo de la Vid y el Vino de Cafayate, donde se la exhibe habitualmente. Antes de devolverla al museo, la reliquia también se exhibirá en Salta para el día del periodista.
En 1824 fue llevada a Salta y funcionó como Imprenta de la Patria en esa capital hasta 1867, cuando el caudillo Felipe Varela invadió la ciudad. Durante ese tiempo salió publicado el primer periódico salteño “La Revista Mensual”
En ese momento, algunos tipos de plomo de la imprenta fueron utilizados como metralla, y para fabricar balas para la defensa de la ciudad.
Según la creencia popular, allí habría terminado la historia de la añeja máquina, pero un trabajo del profesor Nestor Quintana se encargó de demostrar, que en realidad fue llevada a Cafayate, en donde funcionó hasta 1920. Quintana señaló, que lo último que se imprimió en esa máquina fue el diario cafayateño “La Verdad”, en la década de 1920.
Después ya no se la volvió a usar, y fue pasando de manos hasta que la recuperó Florentino Tilca, quien la cedió a la Municipalidad de Cafayate en 1979.
La prensa forma parte de la colección del Museo de la Vid y el Vino de Cafayate, donde se la exhibe habitualmente. Antes de devolverla al museo, la reliquia también se exhibirá en Salta para el día del periodista.
Fuente: El Tribuno de Salta
7 comentarios:
El dato es sorprendentemente incorrecto, en 1764 no existían las prensas de hierro! es una pena que alguien se haya tomado el trabajo de investigar, aunque evidentemente con poca profundidad, y haya omitido ese detalle. Saludos, p
Ante todo, Patricio cuanto? No tengo el gusto.
Cuando llegué a la Feria del Libro y me encontré con una prensa enteramente de hierro me llevé una gran sorpresa.
Pues manejaba el dato de que esta harían su aparición a partir del SXIX de la mano de Lord Stanhope (así apareción en mi libro).
Al volver a mi casa comencé a chequear los documentos que manejaba y en los inventarios de lo venido de Córdoba en 1780 aparece la prensa de hierro...
Suena sorprendente pero al parecer es así.
Entonces lo de la "poca profundidad en la investigación" lo tomo con pinzas...
Un saludo y mucho gusto.
Fabio, creo que me dejé llevar por el entusiasmo y quedé como un pedante... Disculpas. La prensa que aparece en las fotos luce como una Dingler, Christian Dingler nació en 1802! Podrás ver una parecida en los talleres de la Carcova. La particularidad de esta prensa es el sistema de presión por la rotación de tres columnas, sistema totalmente innovador y desconocido en el sxix. Patentado por Abraham Ogier Stansbury. En el sxviii las prensas eran a tornillo. La primera imprenta de fundición, como bien decís (me da curiosidad leer tu libro), fue la fundida por Charles Stanhope en 1800, su diseño a tornillo proviene de una prensa de madera diseñada por Wilhelm Haas en 1772. La primera imprenta patria debió haber tenido pocas partes metálicas, James Moran describe en la p31 del libro Printing Presses cuales eran las partes metálicas de las prensas de la época, pero es indudable que fue mayormente de madera...
Desconozco los términos de la documentación consultada pero evidentemente ha habido un problema de interpretación. Por ej, muchas veces la palabra imprenta incluye a los tipos movibles que si eran metálicos (aunque no de hierro)...
Con pinzas o sin ellas brindo por tu libro, hay sed de contenidos!)
Un cordial saludo,
p
Mmmm... tanto la Dingler como la Albion parecen posteriores a la, llamémosle por ahora, "prensa de expósitos" que se expone en Salta. No soy especialista en mecánica, pero veo muy diferente el sistema de palanca utilizado para mover la platina.
Por ahora le sigo dando la diestra al inventario de Sánchez Sotoca.
Aunque la duda ya está sembrada... ¿habrá quien pueda quitarles el orgullo a los salteños?
Saludos
Hola Fabio,
seguiré el intercambio "off the record" para mandarte algunas imagenes, aunque no seas un experto en macánica podrás encontrar las semajazas, después si te parece se podrán publicar.
Un gran amigo y autoridad en la materia, Juan Pascoe, me mandó un trabajo (pdf) suyo donde explica claramente los momentos en los que fueron apareciendo las distintas prensas y me dijo: "La foto de la prensa revela un aparato digno de conocerse, no obstante que no podría —tal como dices— haber sido prensa de madera del siglo XVIII. Dingler o algo ruso: no sé: algún día debieras de buscarla para investigar sus detalles."
Tengo algunos grabados viejos de prensas rusas y Juan puede tener razón.
Dale la diestra... pero en ese caso espero que seas zurdo:)
Un cordial saludo, p
Dale, espero ansioso el PDF entonces... si te parece, mandámelo a fabioares_dcv@yahoo.com.ar y la seguimos por ahí...
Saludos
Sería interesante saber a que documentos e inventarios se refiere el autor, y que se cite el punto donde se especifica que la prensa es de hierro.
TODA el corpus de historia de la imprenta sostiene que las prensas de hierro colado (tecnología que en 1764 estaba en pañales) aparecen a principios del siglo XIX de la mano de Stanhope.
En este caso estaríamos frente a una excepción HISTÓRICA, y además, en un país periférico al desarrollo de la imprenta.
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